29/3/09

El secreto de las tardes






1 comentario:

Anónimo dijo...

estoy conciente que cada quién tiene sus razones para escribir; también sé que el estúpido academicismo desdeña mucha literatura que no se le parezca a los premios nobel o en su defecto al realismo mágico (borges, márquez, cortazar y compañia); pero la verdad no me importa.

cada quién va generando sus foros, va construyendo opciones, va picando piedra y va abriéndose camino por donde le plazca; por lo menos yo, escribo para vomitar toda la podredumbre que traigo cargando y si en eso, me encuentro con uno que otro lector, pues que bien. por lo menos sé, que hay alguién que está escuchando y al mismo tiempo se está inconformando.

va canalla, un saludo bien cocainómano.

israel